En el cine, y desde los años 90, en la televisión de la región Caribe colombiana, los documentalistas han puesto su enfoque en la fiesta popular barranquillera El Carnaval de Barranquilla. Barranquilla, era el principal puerto del país, como lo aseguran los historiadores regionales, esta gozó de la ventaja de verse influida por ideológicas foráneas, como los adelantos tecnológicos que llegaban al país: la navegación, a vapor, la televisión, la radio, el ferrocarril, la aviación y claramente el cine. El Carnaval tiene poder debido a los primeros años del cine colombiano, con la pieza cinematográfica de 1914 ‘‘Carnaval de Barranquilla’’ grabada y dirigida por filmada por el fotógrafo italiano Floro Manco. Fue el primer documental autónomo realizado en nuestro país. Floro Manco nació en Scalea, Italia, el 10 de octubre de 1875 y es considerado el pionero del cine documental en Colombia. Su padre Antonio manco murió aquí en Barranquilla, se dice entonces que él quería conocer el sitio donde estaban los restos de su padre. (ROJAS ROMERO, 1997: 9). Manco hizo un recorrido por América Latina, recorriendo distintos países. Primero llego a Río de Janeiro, en Brasil, y entró a Colombia junto a su hermano Vincenzo por la ciudad de Ocaña, la ciudad fronteriza. Allí buscaron los restos de su padre, no se sabe si los encontró, pero en todo caso él quedó enamorado del lugar, encontró un paraíso en su época y pudo desarrollarse como fotógrafo porque en Barranquilla no había competencia en fotografía.